microcosmos

1 de Agosto – Inicio del viaje

 

Carretera y más carretera hasta llegar a Francia. Dormimos en un área de servicio en la autopista al lado de Marsella a pesar de lo poco recomendable que ya sabemos que es.

2 de agosto – Carretera

Llegamos por la noche a Venecia (1.800km desde Madrid). Decidimos pasar el día siguiente en la hermosa ciudad y por ello dejamos la AC en un parcheggio que ya conocemos (pincha y lo ves) al lado de un embarcadero. Es muy barato (4 euros al día), con césped y mucha sombra, casi como un cámping, aunque notamos algunos cambios: los horarios de entrada y salida de las autocaravanas son algo diferentes a los del año pasado, y además ahora pretenden cobrarnos el agua del depósito de la AC (3 euros!). Ya la cogeremos de cualquier gasolinera. Italia han sido unos 30 euros en peajes.

3 de agosto – Venecia

Vamos a Venecia a pasar el día en un autobús municipal (ya conocemos los vaporettos y para estas vacaciones debemos ir ajustando los gastos). Después de regatear con varios gondoleros mi mujer acaba encontrando el que nos parece más barato por el mismo tiempo en una de las callejuelas de la ciudad (60 euros/40 minutos). El calor y la humedad son tremendos, muy diferente al agosto del año pasado que fue más fresco. Volvemos por la tarde a la AC y nos ponemos en ruta. Entramos en Eslovenia y como ya íbamos advertidos desde España prestamos mucha atencíón a la nueva viñeta (pegatina) eslovena que todos los vehículos deben comprar al entrar en el país (autobuses y camiones no). La pegatina son 35 euros y da derecho a circular por las autopistas eslovenas durante 6 meses. Quien no la compre se arriesga a una multa de entre 150 y 800 euros. No es broma. Unos franceses en Turquía me confirman la multa que les cayó a ellos. Paramos un rato en un área de servicio eslovena magnífica. El paisaje es impresionante… bosques y bosques y 6 grados menos de temperatura que unos kilómetros atrás, Water quimico, toma de luz gratuita y un olor a vegetación increible. Seguimos adelante, por la noche entramos en Croacia donde ya comienza el desfile de puestos fronterizos que veremos todo el camino con sus, por lo general, poco simpáticos aduaneros y aduaneras. Dormimos en un área de servicio croata.
El gran canal de venecia con un calor sofocante

4 de agosto – Carretera

Croacia, Serbia y Bulgaria. Parecidos y diferentes. Hace 20 años Yugoslavia era el país más desarrollado del este de europa y Bulgaria estaba detrás. Hoy Croacia y Serbia me dan la impresión de haber sido adelantados hasta por Marruecos y desde luego por la propia Bulgaria. Creo que la separación de esfuerzos desde su fragmentación en varios países independientes lo único que ha conseguido es disminuir el progreso. Pequeña agricultura, muchos autos Ladas y Yugos con 20 años encima y poco industria fuera de las ciudades. No hay naves industriales a la vista, no hay fábricas. Es bastante desolador. Por si fuera poco Croatas y Serbios compiten en robarnos a mano armada en los peajes de sus autopistas. 20 euros en peajes por atravesar Croacia (dudan entre aplicarnos la clase 2 o la clase 3 mucho más cara y al final nos aplican la 2). Pero la palma se la llevan los Serbios. 60 euros ! por atravesar Serbia. Mucho más que cualquier otro país. Nos aplican una clase 8 tres o cuatro veces más cara que un turismo. Para colmo los últimos 200 km desde Nis hasta la frontera búlgara son una carretera "internacional-comarcal lamentable". Sin embargo Bulgaria da otro aspecto aunque tampoco sea para tirar cohetes. Utilizan el sistema de viñeta o pegatina esloveno aunque por escasos 5 euros y ellos mismos te lo cobran en el puesto fronterizo. Una aduanera búlgara quiere entrar dentro de la AC a revisarla pero intenta abrir la puerta ella misma y nos arranca el tirador quedándoselo en la mano. Una "gracia" que hará que durante el resto del viaje no podamos entrar a la AC desde el exterior más que por las puertas de la furgoneta. Dormimos en un área de servicio búlgara.

 

En todo el viaje está haciendo mucho calor, y aunque dentro de la autocaravana no hace mucho al ir en movimiento, el aire tórrido golpeando la autocaravana está haciendo que la nevera no funcione en absoluto. El congelador también está fallando. Cuando estamos parados aunque haga mucho calor sí se recupera, pero en marcha con el aire caliente que choca con la autocaravana no funciona. La carne que llevamos congelada desde España corre serio peligro. Esto va a ser así todas las vacaciones cada vez que tenemos que hacer una etapa larga de kilómetros.

5 de agosto – Turquía

Entramos en Turquía previo pago de un visado de 10€ por persona. Las primeras diferencias con Europa del Este me parecen enormes. En la misma frontera hay un frenesí de grúas, obras, obreros, etc. Vamos por una magnífica autopista a diferencia de las carreteras del este de Europa y tiene todo el aspecto de un país muy desarrollado. Otra diferencia pero muy mala: el gasoil tiene un precio astronómico: 1,7 euros el litro (!). Posiblemente el precio más alto de toda Europa o del mundo. Tras 200 km de autopista y 3.550 km totales llegamos por la noche a Estambul-Istambul pagando sólo 5 euros de peaje, lo cual es de agradecer para compensar el susto de cuando se agote el gasoil búlgaro del depósito (aquí lo llaman Motorin ó Dizel) y tengamos que repostar a precio turco. Los peajes de Turquía al menos son así de baratos y junto a una red de autovías gratuitas muy decentes dan un mapa de carreteras muy rápido para las enormes distancias. Algo que descubriré con el tiempo es que hay algunas gasolineras por el interior del país que tienen el gasoil a 1,5 euros, así que conviene estar atentos a ellas.

En Estambul nos dirigimos a un parking que alguien ya recomendó en el foro de internet y yo tenía anotado. Es un parking en pleno centro de Estambul, en el Cuerno de Oro junto al puente de Gálata. Nos cuesta un poco conseguir dirigirnos al centro urbano pero al final llegamos. En el parking nos sitúan a 5 metros del mismo agua del cuerno de oro sobre un espacio de césped. Tenemos un grifo de agua en una mezquita a 50 metros y además conseguimos coger wi-fi libre de la universidad de al lado. Nos duchamos y salimos a dar nuestro primer paseo por Constantinopolis.

Pulsa aquí para ver el párking en Google Maps

Aparcados en el mismo cuerno de oro y puente de Gálata

6 y 7 de agosto – Estambul

Dedicamos estos dos días a visitar la ciudad y a hacer las típicas visitas del primer viaje de todo turista a Estambul. Eso sí, sin agobios ni tampoco pretender abarcar todo, al fín y al cabo hay que dejar cosas sin ver para intentar regresar a cada lugar que se viaja una segunda, tercera o cuarta vez. Así que Gran Bazar, Santa Sofía, las cisternas (las cosas que hizo el emperador Justiniano son increíbles todas ellas), Mezquita Azul (preciosa), Bazar de las especias y un crucero por el Bósforo hasta el mismo Mar Negro con una parada en un pueblecito pesquero donde se puede comer pescado a buen precio. Durante los dos días también paseamos y paseamos y también comemos riquísimos kebaps, pescado, etc, algunos a precio de clavada y otros a precio de paisano del lugar.
                            
Estar aparcados a cinco metros del cuerno de oro nos permite ver el trasiego constante de embarcaciones idéntico al enloquecido tráfico de personas y vehículos, sobre todo durante el día, claro está. Eso quiere decir que quizás hicimos bien en llegar de noche a Estambul, y que seguramente sea conveniente salir también de noche de la ciudad para evitar el caos circulatorio.
La mezquita azul vista desde Santa Sofía

8 de agosto – Mar Negro y Carretera

Salimos la noche del 7 de Estambul no habiendo visto todo lo que querríamos. A mí me hubiera gustado el Museo Arqueológico, pero es bueno dejar deberes pendientes para sentir la necesidad de volver. El puente que enlaza Europa con Asia es espectacular, con iluminación de colores cambiantes, y resulta muy emocionante la sensación, pero al acabar de cruzarlo de pronto nos encontramos con un peaje que resulta imposible de pagar ya que utilizan tarjetas electrónicas todas las casetas. Un amable taxista viendo nuestros problemas nos pasa su tarjeta por el lector y nos pide a cambio 5 liras que se supone que le habrá costado a él… quizás haya beneficio de por medio pero nos ha sacado del apuro pues la barrera se ha levantado. Esta noche del 7 al 8 dormimos a 100 kms de Estambul y por la mañana continuamos hacia Capadocia. Al poco de ponernos en marcha y aprovechando la cercanía del Mar Negro decidimos desviarmos 40 kms al norte y pasar la tarde en una playa del Mar Negro. Salir de la autopista supone descubrir que las carreteras secundarias turcas son muy buenas, en muchos casos autovías. La espesura de los bosques según nos acercamos a la costa es increíble. Algún otro viaje que hagamos a Turquía habrá que explorar la costa norte a fondo, pero en este no podrá ser. Llegamos al Mar Negro y está completamente embravecido. Olas enormes rompiendo en la misma playa nos impiden bañarnos y nos tenemos que conformar con mojarnos los pies. Tampoco hace mucho calor, esto viene a ser como el Cantábrico y hemos debido pillar un día malo. Es un cambio completo de clima en una distancia de unas decenas de kilómetros. Por la tarde nos vamos de nuevo hacia Capadocia.

9, 10 y 11 de agosto – Capadocia

 

Por la tarde del 9 llegamos a Capadocia. El pueblo de Uchilar nos hace pensar en los seres humanos como abejas viviendo en colmenas, ahora son las grandes ciudades, pero también hace más de mil años construimos colmenas humanas. Toda una montaña convertida en un "rascacielos" de la antiguedad. Llegamos al pueblo de Göreme, muy pensado para el turista con un aire muy cosmopolita: turistas europeos de viaje organizado junto a mochileros japoneses buscándose la vida y paisanos que parlotean cualquier idioma. Tras visitar el museo al aire libre que es como un enorme monasterio troglodita nos alojamos en el Camping Göreme que tiene piscina con dos toboganes para que las niñas se diviertan también. En el Cámping hablamos con una familia francesa que vienen de vuelta de nuestro mismo destino. Vienen de Aqaba en Jordania tras atravesar Siria de ida y de vuelta. Les pregunto sobre los impuestos de entrada a Siria y las cifras que me dan se corresponden con lo que luego comprobaremos nosotros mismos en la frontera. Esta familia conoce bien esta parte de Asia, ya que también han viajado en otras ocasiones por Armenia, Georgia y Azerbaiyan. También conocemos en el cámping una familia bilbaína muy viajera con la que compartimos una velada muy entretenida. Son incontables los países en los que han estado, anteriormente de mochileros y ahora con su camper. A quienes nos gusta viajar no hay nada como escuchar por la noche historias y anécdotas de otros viajeros, y estos amigos bilbaínos que han viajado por muchos más sitios que nosotros nos mandan a la cama con mucha envidia sana de sus recorridos por toda Europa y fuera de Europa. 

Nos hacemos perezosos en el cámping y al final tenemos que renunciar a ver el cañón o valle de Ilhara ya que es una visita de varias horas. En otra ocasión será. Nos despedimos el día 11 de Capadocia visitando la ciudad subterránea de Derunkuyu donde vivían hasta 10.000 personas bajo tierra en incontables pisos bajo tierra de los que sólo se han excavado ocho. Los pozos de ventilación, los laberintos, las cocinas y dormitorios y las puertas redondas de piedra maciza para sellar las galerías ante el ataque enemigo me recuerdan nuevamente a algo de una película fantástica como el Señor de los Anillos.

12 de agosto – Carretera y frontera Siria

Nos acercamos a la frontera Siria, estamos en Adana, el otro extremo del Mediterráneo, y aquí pasamos el primer día y la primera noche de calor tremendo porque se une la enorme humedad. Parece que todo el calor del Mediterráneo desde Cádiz se acumula en este extremo del Mar. Desde Adana hasta Antalya, esta zona de la costa turca mediterránea es tremenda del calor+humedad, y eso que está en la misma latitud que Valencia. Éste será uno de los dos sitios que pasaremos calor de verdad, junto con Aqaba en Jordania.

Como yo iba con mucho miedo de no conseguir agua decente en Siria, acumulo bidones de agua en Turquía antes de cruzar la frontera.En esta parte de Turquía sobra el agua por todos lados, y de buena calidad. Al parecer la mitad este de Turquía ya es otra cosa y tienen más problemas y por eso han hecho la gigantesca presa Ataturk, pero por aquí abundan las fuentes al borde de la carretera, o en cualquier gasolinera. Lleno casi 80 litros en bidones aparte de los 100 del depósito. En Siria comprobaré que agua, haber hay, otra cosa es su calidad incluso para lavar.

Llegamos a la frontera Siria. Nos asaltan las dudas de si el viaje no es una pequeña locura y si no sería mejor dedicar el resto de vacaciones a Turquía, más aún por los impuestos que sabemos que hay que pagar por entrar a Siria con vehículo diesel. Pero por otro lado tenemos los visados de Siria y Jordania en los pasaportes (180€ todos) y sería una pena no usarlos y tener que volver quién sabe cuando. El caso es que nos tiramos varias horas perdidas entre la frontera de Turquía y Siria. Multitud de camiones colapsan la frontera. La primera parte, que es la aduana turca tardamos para salir una hora y pico, nada que ver como cuando entramos al país. La segunda parte, la aduana Siria es más caótica, de una ventanilla a otra, papeles a rellenar sólo en árabe, etc. Nos ayudó el típico escribano de las fronteras marroquíes al que le dimos una propina por guiarnos y rellenarnos algunos impresos. Finalmente queda clara toda la cuestión de los impuestos para entrar en Siria. Son tres tasas pero varía la cuantía en función de la estancia en el país. En nuestro caso para una estancia de tres días para redondear en euros son unos 55 euros de impuesto de vehículo diesel, otros 55 euros de seguro (la carta verde no vale) y otros 55 euros de la “carte de passage” una especie de pasaporte como un libro amarillo para vehiculos a motor que llevan todos los camioneros y nosotros no (con el tiempo acabo por entender lo que es la carte de passage y sus ventajas si hay que moverse fuera de la UE). Total 175 euros. Cuando volvamos a entrar desde Jordania habrá que volver a pagar dos de esos impuestos nuevamente (diesel y carte de passage-120€). El seguro no ya que tiene una validez de un mes. La sorpresa es que el Diesel no es tan barato como pensaba en Siria. 25 libras sirias el litro, que vienen a ser 40 céntimos de euro. Nada que ver con los 8 céntimos de euro que había leído en algún sitio de Internet. Llenar el depósito al completo nos cuesta unos 25 euros, que aún así da gusto. Una vez en Siria hemos entrado en otro mundo. Ni siquiera Marruecos me parece tan tercer mundo. Siria lo supera con creces. Yendo por la autovía de la frontera hacia el interior nos encontramos en apenas unos minutos con un asno atropellado muerto en el arcén, niños de 12 años cruzando un rebaño de ovejas por la autovía, gente andando por los carriles de la autovía sin miedo (incluso por el carril rápido), coches yendo en sentido contrario. Es impresionante. Hay que adaptarse o morir. Eso sí, una vez se echa la noche encima decido que mi capacidad de adaptación para conducir en Siria no abarca al horario nocturno y paro en lo que es un área de servicio siria: gasolinera+bar donde conseguimos dormir algo a pesar del intensísimo tráfico nocturno (la suicida conducción siria incluye el horario nocturno).

13 de agosto – Palmira y Damasco

 

Dedicamos el día a visitar Palmira. Una familia catalana muy amable nos invita a unirnos a su grupo con su guía para recorrer las ruinas de la ciudad del desierto. Muy simpáticos recorremos con ellos el templo de Baal y luego ya el resto de la ciudad nosotros solos.
Palmira

Después nos vamos al castillo que Saladino mandó construir en la colina al lado de la ciudad y que se encuentra bastante bien conservado. La vista desde el castillo es espectacular… el palmeral del oasis de Palmira y los restos de la ciudad en medio del desierto sirio… También visitamos algunas tumbas del valle de las tumbas cercano a  Palmira. En conjunto todo ello muestra lo cerca que estamos de egipto y de babilonia…se ven muchas influencias en los capiteles de las columnas, los pórticos de la ciudad, el valle de las tumbas. Muy oriental y egipcio todo ello y menos romano. Al atardecer salimos de Palmira hacia Damasco yendo por una carretera que va paralela a la frontera iraquí. En esa carretera hay un trafico muy intenso de coches nuevos con matrículas iraquíes pero de marcas americanas (Chevrolet, GMC, Pontiac, etc) en un sentido y otro. Los que vuelven hacia Iraq van cargados de cosas y los que van a Damasco van vacíos. Imagino que serán iraquíes que han prosperado bajo la administración americana poseyendo incluso un coche nuevo americano y que se dedican a comprar cosas en Damasco para llevarlas a su país. Algún Hummer militar con soldados nos recuerda que estamos cerca de zona bélica. También hay muchas bases militares sirias e incluso carros de combate en trincheras excavadas a pocos metros de la carretera. Está claro que Siria está en una situación de situación de "preguerra" con Israel hacia un lado y con los EEUU mirando a Iraq. En Damasco aunque sabemos del cámping que hay, aparcamos en el párking del Museo Arqueológico para estar más céntricos y poder dar un paseo nocturno por la ciudad vieja. Por la mañana dudamos entre visitar el Museo Arqueológico o dejarlo para la vuelta. Al final decidimos irnos hacia Jordania. Me arrepentiré ya que el museo cierra los martes y será ese día cuando volvamos a estar en Damasco en la vuelta.

14 de agosto – Mar Muerto

Cruzamos la frontera siria-jordana. Al final se le va cogiendo el tranquillo a esto de hacer papeleos y pagar impuestos imprevistos. Para salir de Siria un nuevo impuesto de unos 7 euros por cada mayor de 12 años. Para entrar en Jordania un impuesto parecido al de entrar en Siria pero menos abusivo. Unos 50 euros por asegurar la autocaravana. Nada más entrar en Jordania se aprecia que no tiene nada que ver con Siria. Una país mucho más avanzado donde se ve que el dinero del turismo da resultados. Mejores codches, mejor conducción por autopistas y ciudades, mejor aspecto todo en general. En la autopista a la entrada de Amman vemos por delante una autocarvana. Sea del pais que sea merecerá la pena saludarles así que acelero un poco para ponerme a su altura… y es ¡española!. Paramos en el arcén y resulta ser un hispano-jordano llamado Alí que lleva 30 años en España y ha venido a Jordania a ver a su familia con la Autocaravana. Es amabilísimo y nos da el teléfono de un hermano suyo que vive en Petra el cual nos ayudará cuando vayamos allí de visita. Prometemos verle en su casa de Amman cuando acabemos nuestra visita al sur de Jordania y partimos para el Mar Muerto.

Después de equivocarme en la ruta y estar a punto de entrar en la Cisjordania ocupada por Israel (un control militar jordano me envía por la ruta correcta) al final llegamos al destino. La primera impresión cuando se llega al Mar Muerto es que parece que se baja a las profundidades de la tierra por que el resto de Jordania está a una altitud de 1000 metros y desde arriba tiene toda la sensación de una enorme grieta en la tierra (es lo que es). El altímetro de mi reloj marca -375 metros de altura. Bañarse en el Mar Muerto es algo muy extraño (¡¡y doloroso si se tienen pequeñas heridas o arañazos!!). El agua tiene una textura rara, un poco viscosa y está más caliente que la temperatura corporal… y es real lo de que es imposible sumergirse (¡¡o ahogarse!!).
>Increíble puesta de sol de color dorado (Mar Muerto)

El sol se pone por tierras israelíes y hay una luz especial dorada en la puesta de sol que no he visto nunca. No es un truco, es de ese increíble color. Hay alguna playa pública, pero hemos preferido entrar en un complejo turístico con piscina y playa privada, ya que se agradece un baño en agua dulce. Eso sí, el complejo turístico es caro de narices… 10 euros por persona por entrar a una playa que a su vez tiene piscina y bar.  Somos pocos los occidentales, y mi mujer en bikini está perdida en un mar de mujeres jordanas y saudíes tapadas hasta el último centímetro de su piel que se limitan a observar cómo se baña el resto de su familia. Ese papel de la mujer en público siempre me ha sublevado, incluso aunque estemos en su tierra y se considere que debemos "respetar sus costumbres"… no lo soporto. Con la noche salimos en dirección a Petra. Las carreteras jordanas son mejores que las sirias y la conducción es muy respetuosa por lo que conducir de noche no es arriesgado. Llegamos a Petra de madrugada con sólo 1 ó 2 horas para que salga el sol (amanece a las 5.30h) y dormimos el tiempo que podemos aparcados en las cercanías de la entrada a las ruinas.

15 de agosto – Petra

Nos citamos con el hermano de Alí, Hussam, y uno de sus hijos nos lleva como guía por la ciudad de los Nabateos. La espectacularidad de la ciudad aumenta con el paraje natural en el que se encuentra, escondida en la profundidad de un cañón. A vuelo de pájaro está completamente escondida, es una obra extraordinaria. El estado de conservación en algunos casos es magnífico, casi comparable a Pompeya.
Petra se va asomando por el desfiladero

El conjunto de la ciudad es espectacular, pero los templos excavados a la montaña son increibles, no sólo el más conocido de Petra llamado "el tesoro" sino otros incluso mas grandes. Por la tarde merendamos con Hussam (el hermano del hispano-jordano Ali que nos encontramos entrando en Amman) y su familia en su casa. Su hospitalidad es abrumadora. Tras unas horas en su casa vamos con ellos a visitar la pequeña Petra, una réplica de la Petra original pero mucho más minúscula que sirvió de ensayo para la original. Nos despedimos de esta familia que nos ha atendido tan amablemente pensando que los españoles hemos perdido hace mucho esa hospitalidad. De Petra nos dirigimos al Wadi Rum y dormimos en el aparcamiento de la entrada.

16 de agosto – Wadi Rum

 

Como la autocaravana no es 4×4 no podemos vagabundear por el Wadi Rum a nuestro aire y tenemos que contratar una excursión en jeep, que no es cara (unos 40 euros en total la excursión de 4 horas). Desde fuera del parque del Wadi Rum ya se anticipa el espectáculo que se va a encontrar dentro. El desierto rojo de Lawrence de Arabia es de una belleza impresionante, para estar varios días por aquí perdido, y sobre todo con sus noches bajo las estrellas si se dispone de tiempo. En la ruta visitamos varios de los puntos más interesantes del Wadi Rum aunque algunos otros (como el puente de piedra más grande) son exclusivos de otras excursiones más largas. No es comparable a las dunas del Sáhara, son diferentes, cada cual es un desierto con su belleza, pero la del Wadi Rum es realmente especial.
Vista del Wadi Rum desde la fuente de Lawrence de Arabia

Para disfrutar realmente el Wadi Rum hay que estar en él un par de días, si puede ser con un 4×4 propio, o acampado en tienda de campaña en plan excursionista. El atardecer, la soledad nocturna y el amanecer deben ser impactantes si se tiene la posibilidad de estar en el desierto de esa forma. En nuestro caso nos limitaremos a saborearlo durante cuatro horas. Cuando vamos a irnos al atardecer nos encontramos una autocaravana francesa que llega al parking, una familia de estrasburgo igual a la nuestra, matrimonio y dos hijas. Charlamos del viaje y del Wadi Rum que ellos visitarán al día siguiente que será especialmente bonito ya que habrá eclipse de luna y los beduinos al parecer van a hacer una fiesta especial… con envidia de esa fiesta beduina, nosotros veremos el eclipse de luna desde Aqaba, hacia donde partimos al despedirnos de ellos.

17 y 18 de agosto – Aqaba

Llegamos la noche del 16 a Aqaba y buscamos un hotel especializado en dar servicio a autocaravanas que tenemos apuntado por leer a otros viajeros. El Bedouin Garden Village (no confundir con el de al lado de nombre parecido mucho más caro). Este hotel permite pernoctar en el parking y utilizar todos los servicios del hotel (piscina, duchas, WC, bar, enganche de luz, etc.) por… 8 euros al día!!!. Incluso permite dormir en tienda de campaña. También alquilan material de buceo para el arrecife de coral que tiene justo enfrente. Nosotros llevamos algunas aletas y gafas pero nos harán falta otras por lo que se las alquilaremos a ellos ya que es barato.

Al instalarnos encontramos bastantes “vagamundos” en el hotel. Unos en autocaravana-camión 4×4, otros en autobús-camión 4×4 (ver las fotos). Resulta que los del camión-autocaravana son españoles!! Se trata de una pareja catalana, Jordi e Isabel que vienen de recorrer asia…Jordi en concreto lleva…2 años recorriendo el mundo!!! e Isabel se acopla a su viaje cada cierto tiempo regresando periódicamente a España…a mí se me descuelga la mandíbula y se me cae la baba en cuanto oigo eso. Tenemos el placer de pasar una velada nocturna maravillosa con Jordi contándonos mil aventuras de sus viajes que me provocan una terrorífica envidia, sana o insana, da igual, es envidia cochina y enorme, jeje. Por la mañana del 17 nos vamos con ellos a bucear justo enfrente del hotel que está un reconocido arrecife de Aqaba, el japanese garden, que con un tubo, gafas y aletas ya se puede disfrutar sin necesidad de saber bucear con botella.
La familia buceando en el Mar Rojo

La cámara de fotos submarina desechable que traíamos de España nos dura 10 minutos, ya que hay tantas fotos para hacer que en poco tiempo hemos gastado el carrete.

Pero no todo es alegría y bonito, mi mujer se roza con algo (quizá una anémona o coral) y sale con todo el muslo inflamado, irritado y con mucho escozor. Le tardará 15 días en desaparecer por completo. Yo toco sin querer un erizo y no tiene nada que ver con los erizos del mediterráneo, noto un dolor al instante y al sacar la mano del agua veo que cada pinchazo está con un color morado del veneno. Es muy doloroso aunque a mí me dura solo 2 días. De todos modos lo hemos pasado bien, ya probamos esto de snorkel en el Caribe hace unos años y es muy bonito.
Hemos pasado un primer día en Aqaba muy bueno, con mucho calor pero lógico y soportable. El segundo es peor. Empieza a soplar el aire del Oeste y eso es lo peor junto con el viento del Sur, en este caso del Oeste porque viene del desierto del Sinaí. El calor es sofocante al máximo, menos mal que no hay humedad ya que el Mar Rojo es pequeño aquí, pero el aire es un horno, la sensación térmica es de  50º o más. Es como cuando se sube a la montaña y además de hacer frío hay ventisca que multiplica el frío, pero aquí justo lo contrario. Los labios los tenemos agrietados al cabo de unas horas.

Salimos el 18 de Aqaba, nuestro destino más lejano, hasta este momento todo era "ir" y ahora todo será "volver".  Además un problema familiar nos cambia el estado de ánimo lo suficiente como para llamar a Alí y decirle que no podremos ir a verle a su mujer segoviana y a él en Ammán. Este día todo es carretera hasta la frontera Siria y más allá aún, incluso hasta Damasco, donde volvemos a aparcar en el Párking del Museo Arqueológico con la intención de verlo al día siguiente. Lamentablemente el día siguiente, 19 de agosto, me doy cuenta de que es martes, y que el museo está cerrado. El mejor museo arqueológico de Oriente Medio se quedará como un misterio sin descubrir hasta quien sabe si otra ocasión. 

Necesitamos cargar agua, algo que queríamos evitar en Siria, pero no podemos, así que en una gasolinera les pido y me la dan de un camión cisterna. Cargamos el agua por dentro de la autocaravana, quitando los cojines del sofá y vemos como caen junto con el agua grumos extraños y casi unos kilos de arena. Para lavarnos esperemos que sirva si es que no hay que cambiar la bomba del agua…

Por cierto, las fronteras acaban por dejar de tener secretos cuando se les coge la mecánica. Salir de Jordania supone pagar una tasa extra de "porquenosdalagana" como parece habitual por Oriente Medio. La entrada en Siria la hago sin ayuda, peleándome en la cola con turistas y camioneros saudíes, yemeníes, sirios, jordanos, libaneses que no respetan orden alguno ante las ventanillas de las oficinas de la frontera. Volvemos a pagar dos de las tres tasas de entrada a Siria (Carte de passage e Impuesto Diesel). El seguro no, ya que nos sigue valiendo. Total otros 120 euros por entrar en Siria por segunda vez. 

 

 19 de agosto – Krak de los Caballeros y Alepo

Después del fracaso del Museo Arqueológico de Damasco, nos encaminamos hacia otro de los destinos que dejamos para la vuelta: el castillo cruzado del Krak de los Caballeros. Estamos muy cerca del Líbano, y eso se nota en que incluso vemos caravanas de vehículos de la ONU. El castillo del Krak es impresionante, dominando desde un cerro todo lo que le rodea y cuando se ve de lejos o de cerca se entiendo por qué nunca fué tomado por las armas, sino en realidad "abandonado casi por aburrimiento" por los últimos cruzados que quedaban en Oriente Medio. No se si es una ciudad-castillo o un castillo del tamaño de una pequeña ciudad, el caso es que sorprende ver un claustro gótico en medio de tierras musulmanas. Un joven sirio con una bella voz nos hace una demostración de la magnífica acústica de una de las capillas del Krak… Allah u akbar para los cruzados y los caballeros hospitalarios del Krak
                                          

Por la tarde llegamos a Alepo. Aparcamos cerca de la ciudadela y mira tú por donde, también está cerrada por ser martes… hoy hubiera sido mejor quedarnos en una playa del mediterráneo Sirio por que vamos de tropezón en tropezón. De todas formas desde fuera se ve todo lo imponente que es y lo difícil que debía ser conquistarla.

Recorremos su famoso Zoco cubierto, y desde luego que es un Zoco "original". No tiene nada que ver con el Zoco cubierto de Estambul. A mí personalmente me gusta más, aunque para gustos cada persona el suyo. Éste no está pensado para turistas (el de Estambul también tiene sus cosas "originales" pero también tiene una mezcla de algo turístico como los carteles en castellano, italiano, catalán, francés, etc., en Alepo no). Este zoco me sorprende por que además está adornado todo el techo del laberinto y muchos de sus puestos con salmos del Corán en banderolas verdes. Poco a poco me voy dando cuenta de que Alepo, a pesar de la cercanía con Turquía es mucho más "ortodoxa" en lo musulmán que Damasco, Homs, etc. Al poco tiempo nos damos cuenta de que todas las mujeres van tapadas al máximo, incluso dejando sólo los ojos al descubierto, algo que no hemos visto en ningún otro sitio hasta ahora. Pero es que incluso las niñas a partir de los 8 ó 9 años van tapadas de negro dejando sólo el rostro visible. Mi mujer va razonablemente vestida y no es objeto de miradas, pero mi hija mayor de 12 años está dando el paseo en camiseta de tirantes, y 9 de cada 10 personas la miran con asombro como mínimo. En las mujeres no es asombro sino una mirada mezcla de reprobación y escándalo. Nos hacen sentir muy incómodos. Estamos hablando de una niña de 12 años. No habíamos sentido nada así en ningún sitio. Tampoco ninguna otra ciudad que hemos visitado tiene ese sentido tan estricto y, a mi juicio, perverso del islam.

Alepo es sorprendente en muchos aspectos

Cuando nos conseguimos abstraer un poco de tanta mirada hacia mi hija mayor, el paseo se va convirtiendo en algo más agradable. Como yo me suelo atrever con todo, veo un puesto de comida dentro del Zoco con algo que me llama la atención. Rozo un poco la irresponsabilidad por que está hecho de huevo en un aceite negro de tanto refreir. El caso es que es una especie de Kebap que está bueno, pero pasaré los siguientes 15 días soltando líquido de mis tripas justo hasta llegar a España donde se me arreglarán los intestinos de nuevo. Debería haberlo evitado, sobre todo por el hecho de ser huevo con lo que ello conlleva en caso de infección. Creo que si hubiera sido carne el riesgo hubiera sido menor.

Después del Zoco vamos a una de las sorpresas de Alepo: su barrio cristiano. Barrio cristiano de varias modalidades: cristiano armenio, cristiano griego y católico romano. Vamos por sus callejuelas con palacetes y entramos en algunas de las iglesias. Muchas tiendas y comercios armenios así como sus iglesias tienen todas las inscripciones en su alfabeto Armenio tan peculiar. Entramos en una católica también y resulta que hay un bautizo. Podría ser un bautizo de España, con todos los invitados arreglados y vestidos a la occidental, incluso con las mujeres con vestidos muy escotados como en España (un completo escándalo para Alepo). Nos invitan a pasar y estamos un rato compartiendo su ceremonia con ellos hasta que salimos y les damos las gracias por su amabilidad. Nos preguntamos cómo sobreviven estos cristianos griegos, armenios o católicos día a día en una ciudad como ésta. Ya sé que tradicionalmente el Islam ha permitido otros cultos mediante el mero hecho de que sus practicantes pagasen mayores impuestos, pero en fín, aquí en Alepo la tolerancia parece más reducida…o quizá en el fondo sí son tolerantes y por eso siguen existiendo estos cristianos…en fin, misterios de unas y otras religiones que me pillan muy lejanos por mis convicciones tan diferentes.

Habíamos leído de otros autocaravanistas que habían dormido en el párking de la ciudadela. Pero nosotros vamos a dar por finalizada la visita a Alepo, y por ende a Siria, y aunque son las 12 de la noche vamos a aprovechar para cruzar la frontera a Turquía ahora que seguramente habrá menos trasiego.

Y así es, hay relativamente poco ajetreo y parece que merece la pena cruzar estas fronteras difíciles por la noche. Pagamos otra vez la tasa de "porquemedalagana" por abandonar Siria y entramos en Turquía con una simplicidad pasmosa. Indudablemente Turquía es Europa, o casi. Y si no se la deja entrar en la Unión Europea es por tres cosas: porque son musulmanes (aunque bastante superficialmente), porque son 70 millones de turcos (con lo que eso significa para los fondos europeos), y porque si entra Turquía en la UE, las fronteras de la Unión Europea llegarían hasta Siria, Irán, Iraq…pero no hay motivo objetivo para que Rumanía, Bulgaria o Georgia en el Mar Caspio sí estén en la UE y no lo esté Turquía.

Dormimos de nuevo cerca de Adana.

 

20 de Agosto – Playa y carretera por la costa sur de Turquía

  Pasamos un día de playa en una playa de Mersin, al sur de Turquia, junto al castillo de Kizkalesi, que está en un islote a poca distancia de la playa. El agua de esta zona del mediterráneo es transparente. La playa se va llenando poco a poco con multitud de turistas turcos que pasan sus vacaciones en la playa. La playa es recorrida por vendedores ambulantes de comida y bebida, y aprovecho para comprarles una mazorca de maiz que nos comemos mis hijas y yo.

Por la tarde cogemos la carretera costera en dirección a Antalya. Sabemos que vamos a hacer la tira de kilómetros yendo por la costa, pero queremos verla. Lo que en principio era una autovía al final se convierte en una estrecha carretera por los acantilados y calas que forman los montes Tauros. A un lado la pared de la montaña y a otro lado la caida en picado al mar. Velocidad media 40km/h. Todo es espectacular. Salvando las diferencias así debía ser la Costa Brava hace 50 años quizás. Los pinares llegan hasta las calas, y por la carretera se respira un olor a vegetación junto al mar increíble. Esto es un paraíso que en España destrozarían las inmobiliarias en dos días. Hay bastantes campings en las calas que forman las montañas con el mar, y en ellos se ven muchas caravanas y tiendas.

Se nos echa la madrugada en la tortuosa carreterita y dormimos en una pequeña explanada junto a la pequeña carretera, en medio del pinar y a pocos metros sobre el mar. El olor es increíble, pinar mediterráneo virgen.

 

21 de Agosto – Alrededores de Antalya: Aspendos y parque de Kurşunlu Şelalesi

 

Acabamos el recorrido tortuoso de la carreterita de los montes Tauros y el Mediterráneo al acercarnos a Antalya. Nuestra idea es ver aquí tres cosas: el teatro de Aspendos, las ruinas de Termessos y el parque natural de Kurşunlu Şelalesi. Por la mañana vamos al Teatro de Aspendos. En el párking del teatro romano nos encontramos con un gran número de autocaravanas italianas. El precio de la visita al teatro por persona es exagerado (unos 10€ por persona)  sumado a que nos han cobrado otros 4 ó 5 euros por usar el parking. El turista extranjero es asaltado a mano armada ya que el carnet que los turcos pueden sacarse para visitar cualquier ruina o parque natural durante todo un año les cuesta 10 euros aproximadamente. Aún con ese mal sabor de boca el Teatro es magnífico ya que está intacto tras casi 2000 años en pie y de hecho aún se representan obras en él, como en el de Mérida. En Toda la zona de Antalya el calor golpea fuerte y en el teatro hay que buscar las sombras todo el tiempo.

Con el calor que hemos pasado, nos vamos al parque natural de Kurşunlu Şelalesi, uno de los innumerables parques naturales que tiene Turquía. viene a ser algo parecido al Monasterio de Piedra, aunque con mas cascadas y por arte de magia desaparecen los 40º de calor de Antalya con solo meterse en este parque natural tan relajante.
              
Al final se nos echa el tiempo encima, y no veremos ni Termessos ni Perge, pero bueno, sin agobios, ya las veremos en viajes futuros (insallah…).

Por la tarde cogemos carretera hacia Kaş. Toda esta parte de la costa turca es como el levante español, turismo y más turismo. Sobre todo destinado a rusos, alemanes y británicos. Muchas vallas publicitarias escritas enteras en esos tres idiomas ofreciendo apartamentos en la playa, actividades multiaventura,etc. La diferencia con el levante español es que las enormes montañas turcas junto a la costa ofrecen muchas posibilidades de alternativas a la playa.

Por la noche llegamos a Kaş, un pueblo cuya población en el pasado era griega y por eso sus fachadas encaladas blancas y ventanas azules. Después, las expulsiones de griegos y turcos recíprocas que hicieron Grecia y Turquía hace 90 años eliminaron esa mezla de poblaciones que provenía de hacía siglos. Mucha marcha y turismo joven… debe ser algo así como la Ibiza de Turquía. Después de pasear por el pueblo, pernoctamos al lado de la playa.

22 de Agosto – Playa de Kaş y Fethiye-Oludeniz

Dedicamos el día a descansar en la playa de Kaş. Toda esta parte del litoral turco es la más famosa y la que sale en las fotos de todos los catálogos de viajes. Y no es de extrañar, las aguas son transparentes, y la cercanía de las montañas llenas de vegetación o las islas junto a la costa lo convierten en un paraíso. Además afortunadamente no hay aberraciones urbanísticas, ni apenas se ven construcciones a pesar del turismo que hay. Por la tarde nos vamos hacia Fethiye y Oludeniz, otras de las zonas importantes de turismo, no sólo por las playas sino por el entorno natural. Llegamos por la noche a Oludeniz, y de inmediato se ve la diferencia con Kaş. Aquí el turismo es masivo, todo lleno de ingleses de sol y playa seguramente por poco dinero como a las costas españolas. Los locales nocturnos están dedicados por y para los ingleses con karaokes en inglés, carteles ofreciendo "happy hour" de cerveza, partidos de rugby en pantallas gigantes, etc. Kaş tenía más estilo. Aquí no hay ninguno.

Como tenemos problemas para pernoctar en un lugar más o menos aceptable decidimos entrar en uno de los varios Cámpings. Tienen unos precios abusivos (¡nos acordamos de los 8€ que pagamos en Aqaba en Jordania con todos los servicios incluidos!…). Después de preguntar en un par de ellos acabamos por instalarnos en The Sugar Beach. Teniendo en cuenta que tiene un nivel alto de servicios (incluso para los estándares españoles), que además son las 10 de la noche y que pretendemos irnos al mediodía siguiente acabamos por conseguir una rebaja y que nos cobren "sólo" 20€ sin luz. La parte buena es que hay wifi inalámbrico incluido en el precio. Es sorprendente la cantidad de ingleses que vienen de vacaciones a los cámpings de la zona, supongo que alojados en bungalows.

23 de Agosto – Playa de Oludeniz y cañón de Saklikent

Nos levantamos por la mañana en el Cámping, y descubrimos con asombro quienes tenemos al lado aparcados. Otros trotamundos, pero estos a un nivel increíble. Tres parejas surafricanas (con hijos pequeños!) que están recorriendo el mundo (literalmente) en sus vehículos 4×4 convertidos en autocaravanas. Incluso tienen página web actualizada del punto del recorrido donde están: Globeriders, "de Cabo a Cabo", unos viajeros a través del globo que salieron el 11/3/07 de Suráfrica y regresarán allí procedentes de Brasil en junio de 2010 si todo les va según lo previsto tras haber atravesado África, Europa, Asia y América de norte a sur. Os recomiendo especialmente que visitéis su web, y dentro de ella los apartados de Diario-Ruta y Fotos. Y para los "manitas" también cuentan detalladamente el proceso de conversión de los Land Cruiser en autocaravanas.

Pasamos la mañana en la laguna de Oludeniz; las posibilidades que ofrece esta parte de Turquía son infinitas. Esto está lleno de empresas de multiaventura que combinan parapente, barrancos, quads, barcos, cualquier tipo de actividad junto a la de playa. El cielo está poblado de parapentes de turistas que se tiran desde las altísimas montañas cercanas hacia la playa. El entorno es espectacular a pesar del masivo turismo británico.

A mediodía salimos en dirección del segundo cañón más largo de Europa: el cañón de Saklikent (14 km). Y de camino al barranco comprobamos lo espectacular de Turquía en pleno mes de Agosto: los montes Taurus nevados después de una tormenta!

y es que en esas montañas hay algunas de las muchas estaciones de esquí turcas.

Llegamos al cañón de Saklikent, con río que baja con un agua helada completamente, y eso que estamos a casi 40º, pero es que esos son los extraños contrastes de Turquía… las montañas nevadas durante unas horas en pleno mes de Agosto, un calor tremendo y un río de aguas heladas, todo a la vez… extrañísimo. El cañón es muy entretenido; en la zona de llegada de visitantes hay muchos chiringuitos con terrazas situados sobre el mismo río con sofás y cojines para disfrutar de un Té relajante mientras el río baja a toda velocidad debajo tuyo. Recorrer el cañón es un paseo muy ameno, comienza siendo ancho y se acaba estrechando hasta que incluso hay que meterse por pequeños túneles de roca. No hacemos los 14 kms. del cañón, y tras una hora de avance volvemos hacia atrás.

Por la tarde-noche salimos hacia Pamukkale donde llegamos a las tantas.

24 de Agosto – Pamukkale e inicio de la vuelta
De Pamukkale no voy a contar mucho por que casi todo el mundo tiene la foto en su mente. En cualquier caso es una impresión muy extraña, una montaña entera de color blanco y cuando recorres los manantiales y el mineral blanco (trevertino) no tienes del todo claro que sea algo natural (claro que lo es). Las ruinas de Hierápolis junto a Pamukkale no están a un nivel comparable a los innumerables restos griegos y romanos esparcidos por toda Turquía, pero el Anfiteatro ha sido restaurado magníficamente en los últimos 40 años.
A mediodía cogemos carretera y empezamos la vuelta definitiva sin paradas. Podríamos exprimir un par de días más para visitar esto o aquello, pero el día 1 de septiembre debemos trabajar los dos y queremos estar el 29 en casa para tener cierto margen de poner las cosas en orden.
Después de valorar, decidimos volver por ruta diferente a la venida. Sólo pensar en los ladrones de los peajes balcánicos se nos revuelve todo, así que decidimos dar dos saltos de ferry en lugar de volver por carretera. Iremos a Igoumenitsa en Grecia, cogeremos un Ferry a Italia (nos da igual dónde) y en Civitavecchia cogeremos el Ferry a Barcelona, aunque salga más caro por no comprar en su día billetes de ida y vuelta.

25 de Agosto – Atravesando Grecia

Cogemos un ritmo alto de conducción como cuando iniciamos el viaje el día 1. Atravesamos la frontera entre Turquía y Grecia y se mastica la tensión y casi guerra fría. El puente sobre el riachuelo que separa los dos paises es tierra de nadie con una presencia militar muy alta de ambos. Cuando entramos en Turquía desde Siria nos pareció que entrábamos en Europa, reconfortados y con sensación de seguridad de estar en casa. Entrar en Grecia refuerza aún más esa sensación. Además, entrar en una gasolinera griega significa pagar el gasoil a precio de España (1.25€), o más barato aún, ya que durante el mes de Agosto ha bajado el precio del petróleo (cuando salimos de España estaba a 1.31€).

A pesar de hacer kilómetros y kilómetros, dejamos tiempo para disfrutar varias horas de una playa cerca de Tesalónica. Por la tarde volvemos a la ruta. Tenemos la esperanza de llegar a Igoumenitsa a las 2 de la madrugada para intentar coger un ferry que sale a esa hora hacia Brindisi, pero la carretera es infernal. Es alucinante que Grecia no tenga acabada una autovía/autopista a Igoumenitsa. La están terminando pero Igoumenitsa es un puerto internacional muy importante de transporte por ferrys. No se entiende que hasta 2008, 22 años después de entrar en la UE no estén acabando esa vía rápida y haya que atravesar todo el norte de Grecia en una comarcal terrible. Eso sí, el paisaje debe ser espectacular, lo intuimos pero no lo vemos… pasamos por una señal que señala el monasterio de Meteora. Otro viaje será.

Llegamos a Igoumenitsa a las 3 de la madrugada. Hemos perdido ese ferry a Brindisi aunque sale otro a las 7 de la mañana, así que en ese montaremos.

26 de Agosto – Atravesando Italia

El Ferry de Igoumenitsa sale con 3 horas de retraso!!!. Al menos durante el viaje tenemos una agradable charla con autocaravanistas italianos contándonos los viajes. Algunos de ellos vienen de Irán de una expedición de 15 autocaravanas contando excelencias del viaje y de los iraníes. Llegamos a Brindisi a las 4 de la tarde, muy tarde para lo que teníamos previsto por el retraso del ferry pero bueno, comenzamos a recorrer Italia. Nuestro destino será Civitavecchia pero por el camino mañana pasaremos buena parte del día en Nápoles. Dormimos en un área de descanso.

27 de Agosto – Nápoles

El año pasado cuando recorrimos Italia, estuvimos en Pompeya y durmiendo en la cima del Vesubio pero apenas estuvimos en la ciudad, así que dedicamos varias horas a pasear por las callejuelas y a terminar comiendo en el centro en un restaurante familiar de comida casera unas deliciosas pizzas. Por algo son las mejores del mundo.Ajustamos tanto
la hora que cuando salimos de Nápoles hacia Roma ya vemos que no vamos
a poder coger el ferry de hoy hacia Barcelona (salen a las 19h.), así
que dormimos por civitavecchia.

28 de Agosto – Robo y salida a España

Pasamos
el día por civitavecchia. Decidimos darnos el último chapuzón en el mar
del verano 2008 y mientras estamos en la playa nos fuerzan las puertas
de la Autocaravana y nos roban. Lo que nunca nos ha ocurrido en
Marruecos, en Turquía, en Siria o Jordania
durmiendo en cualquier lado o dejando muchas veces la autocaravana
sola, sí que nos ocurre en este "primer mundo"… sea Italia (en Roma el año pasado también) o España (en Valencia junto
a la ciudad de las ciencias). Seguro que los que nos han robado tienen más recursos económicos que mucha gente de esos otros
paises que nunca nos robó y nos atendió tan amablemente. Así es el
"primer mundo". El primer vistazo es desolador,  las
lágrimas  nos salen, sobre todo por las fotos, al menos a mí es lo que
más me preocupa…inmediatamente vemos que no está la cámara de fotos,
un móvil, y damos por hecho que no estarán muchas más cosas. Temblamos
por el portátil ya que conserva todas las fotos… miramos en el
escondrijo, y…. ahí está!! no lo han descubierto…al final nos damos
cuenta que apenas se han llevado nada a pesar del destrozo…ni la
tele, ni el disco duro multimedia, ni el autoradio, ni otras cosas…
sin embargo se han llevado el disfraz turco de mis hijas!!!, ese que
sale azul en una de las primeras fotos en el álbum de arriba del blog.
Increíble…, cámara de fotos con las fotos de Nápoles, un móvil, el
disfraz de bailarina turca, dos pantalones y dos mochilas. Al final
estamos hasta felices y nos reímos. Pudo ser mucho peor. Queda una hora
para que salga el ferry a Barcelona, así que no vamos a los carabinieri
y decidimos poner la denuncia en España. Montamos en el ferry de
Grimaldi, que al igual que el año pasado, tiene una puntualidad
exquisita, tanto para salir de Italia como de llegada a España… nada
que ver con los griegos.

29 de Agosto – Casa

Llegamos a Barcelona a la hora prevista.
La vista del puerto es magnífica, como siempre… qué maravillosa
ciudad, qué orden, qué limpieza… Barcelona resplandece cuando se
llega a ella en Barco. Comemos en un área de la A2 y llegamos a Madrid
por la noche. Fin del viaje. Un magnífico viaje en el que ha habido de
todo. Muy intenso en el que hemos conocido a gente extraordinaria y que quizá sea de esos que se hacen una o dos veces en la vida.

---

Curiosidades

12.500 kilómetros en ruta + 3.000 kilómetros (aprox.) en ferrys

Mares visitados: Mar Mediterráneo, Mar de Mármara, Mar Negro, Mar Muerto, Mar Rojo, Mar Egeo y Mar Adriático

Países: España, Francia, Italia, Eslovenia, Croacia, Serbia, Bulgaria, Turquía, Siria, Jordania y Grecia

Datos útiles

Trámites Legales y fronterizos:

 

Permiso de conducir internacional–
Se consigue en el mismo día en la Jefatura Provincial de Tráfico
correspondiente con una fotografía y 9 euros. Es necesario para Siria y
Jordania aunque a mí no me lo han pedido en ningún lado. Tiene una
validez de un año

 

 

Visados

Turquía – Visado de 10 euros en la misma frontera. Válido para
entrar y salir múltiples veces de Turquía durante 3 o 6 meses (no
recuerdo bien el tiempo)

 

Siria- Visado en origen (España) de 30 euros para múltiples entradas
y salidas de Siria (necesario si se quiere ir a Jordania, o 15 euros
para una sola entrada y salida de Siria si no se quiere ir a Jordania)
– Se puede tramitar por correo enviando los pasaportes a la Embajada
Siria en España. Presencialmente tardan una semana en tramitar el
visado, por correo no tengo ni idea del tiempo ni de cómo se recoge el
pasaporte o si lo reenvía la embajada siria al domicilio del
interesado. El pasaporte no debe contener ningún sello de Israel de
ninguna forma.

 

Jordania- Visado en origen (España) Si sólo se quiere ir a Jordania,
visado de 15 euros para una sola entrada o salida de Jordania (tardan
sólo un día en dar el visado presencialmente, por correo no se cuánto
tarda). Si se quiere ir a Israel, imprescindible un
segundo pasaporte por persona exclusivamente para entrar a Israel por
la frontera de Jordania y que así a la vuelta en Siria no te impidan el
paso al no figurar nada de Israel en el pasaporte que tiene el visado
sirio. En la misma Jordania (Amman) se puede conseguir en la embajada
española este segundo pasaporte en un día por si durante el viaje se
decide visitar israel.

 

Pagos adicionales en frontera:

Turquía- ninguno, vale la carta verde del seguro europeo.

Siria- Si se tiene la "carte de passage" del vehículo (una especie
de pasaporte del vehículo) se pagan dos impuestos en la frontera. Si no
se tiene la "carte de passage" se pagan tres impuestos. La "carta de
passage" se puede obtener en el RACE o RACC, y como decía el amigo
FrancescJ en algún hilo, es muy útil si se viaja mucho por países
extracomunitarios por que ahorra estos impuestos adicionales. La "carta
de passage" se obtiene dejando un depósito económico en el RACE por un
importe de un % del valor del vehículo y que es devuelto al propietario
del vehículo pasado el tiempo. Es una garantía de que ese vehículo es
simplemente para viajar y no para venderse en uno de los paises que se
van a visitar. En cualquier caso no es obligatoria la carta de passage,
pero no tenerla (en mi caso) implica pagar.

Impuestos Sirios:

Para entrar en Siria en la frontera

   1- Seguro del vehículo (no vale la
carta verde, ni el seguro que tengamos): el costo de este impuesto va
en función del tiempo que se esté en Siria, pero para quince días son
unos 60 euros. Esta tasa tiene una validez de un mes, por lo que si se
va a Jordania, cuando se vuelva a entrar en siria no hay que volverlo a pagar

2-Impuesto Diesel: los vehículos diesel
tienen que pagar un impuesto de entrada a Siria. El importe va en
función del tipo de vehículo (coche, camión, autobús, etc). En mi caso
(Fiat Ducato) fue de 60 euros aproximadamente

3-Carte de Passage: al no tener este
documento para el vehículo hay que pagar una tasa al entrar en Siria.
Fue también de unos 55 euros.

Para Salir de Siria en la frontera:

-500 libras sirias (7 euros) por persona mayor de 11 años

Hay que tener en cuenta que si se va a visitar Jordania, se va a entrar en Siria 2 veces y salir de Siria 2 veces, por
lo que estos impuestos que relaciono se pagan dos veces excepto el del
seguro que vale por un mes y no se vuelve a pagar en la segunda entrada
a siria (conservar el impreso del seguro sirio aunque esté todo en
árabe para no volverlo a pagar).

Por tanto en total para entrar en Siria por primera vez tuvimos que pagar 175 euros aproximadamente.

Para entrar en Siria por segunda vez procedentes de Jordania pagamos 120 euros (el seguro no)

Para salir de Siria en las dos ocasiones pagamos 1500 libras, unos 21 euros cada vez.

 

Impuestos Jordanos

 

Para entrar en Jordania en la frontera:

Seguro de automóvil:no vale carta verde
ni seguro que tengamos, se paga un seguro en función del tiempo, por
tres días, por cinco días, por siete días, etc. En nuestro caso por
cinco días fueron unos 55 euros.

Tasa de entrada por persona: 5 euros (20 euros)

Para Salir de Jordania en la frontera:

Tasa de salida: (23 euros los cuatro)

 

Gastos de desplazamiento:

Precios de gasoil:

-Francia e Italia los omito por que son conocidos

-Eslovenia, Croacia, Serbia, Bulgaria y Grecia aproximadamente igual
que en España, céntimo arriba céntimo abajo, Kuna o dinar arriba o abajo

-Turquía: 1,8 euros (3 liras turcas) el litro de gasoil. El gasoil
más caro del mundo. En algunas gasolineras del interior del país o en
el extrarradio de grandes ciudades se puede encontrar a 2,5 liras (1,5
euros). No desaprovechar la ocasión de repostar en ellas.

-Siria: 40 céntimos de euro (25 libras sirias) el litro

-Jordania: 65 céntimos de euro (70 céntimos de dinar jordano) el litro

 

Peajes de autopistas:

-Francia e Italia conocidos sus elevados precios.

-Eslovenia: Tal como avisó una amiga en este foro hace un par de
meses, desde el 1 de julio de 2008 todos los vehículos menos camiones y
autobuses deben comprar una pegatina nada más entrar al país en la
primera área de servicio de la autopista. El precio es de 35 euros y
permite recorrer las autopistas eslovenas durante unos meses. Si no se
compra se corre el riesgo de una multa de entre 200 y 600 euros (unos
franceses en capadocia me dijeron que los policías eslovenos les
obligaron a pagar 200 euros de multa por no comprar la viñeta por
descuido)

-Croacia: unos 20 euros de peaje atravesar el país por su autopista
desde eslovenia hasta Serbia. Vigilar que apliquen la clase 2 en lugar
dela clase 3 que es más cara. En uno me aplicaron la clase 2 y en otro
me quisieron aplicar la clase 3 y al final conseguí que fuera la 2

-Serbia: un auténtico atraco a mano armada: 60 euros en peaje por
atravesar el país desde Croacia hasta Bulgaria en su autopista. Hay que
tener en cuenta que los últimos 150 kilómetros para llegar a Bulgaria
son de una carretera casi comarcal ni siquiera es autopista.

-Bulgaria: se compra una viñeta al entrar en el país como en
eslovenia, aunque en este caso son 5 euros para circular por sus
autopistas durante unos meses.

-Turquía: Peajes muy baratos que compensan el precio del
gasoil. Más o menos cada 100
kilómetros son 2 euros.

-Siria: sin peaje (ojito con la conducción)

-Jordania: sin peaje

-Grecia: autopista del norte en construcción. Sin peaje en los tramos ya abiertos. 

Tipos de cambio verano 2008

Lira Turca – 1 euro = 1,8 liras

Libra Siria – 1 euro = 80 libras

Dinar Jordano – 1 euro = 1 dinar jordano

(cambios aproximados)

Cajeros automáticos:

Sólo usados en Turquía, al llegar a
España hemos comprobado que la comisión han
sido unos 7 euros cada vez. En Siria y Jordania aunque hay cajeros (Siria en las
ciudades importantes, Jordania más) en las propias embajadas me dijeron
que la comisión por sacar allí podía ser de unos 20 euros cada vez que
lo hiciera, así que no los usamos

---